Lope de Vega
1562 - 1635
La Circecon otras rimas y prosas
1624
|
|
______________________________________________________________
|
|
Selección: Rinde tu ciencia, y con temor retira Amor con tan honesto pensamiento Canta Amarilis, y su voz levanta Yo dije siempre, y lo diré, y lo digo
SonetoA Circe.
Rinde tu ciencia, y con temor retirade los Guzmanes rayos los febeos,hija del sol, humilla tus trofeos,su luz respeta, su grandeza admira.
| |
5 | Al plinto ilustre de tan alta piraconsagra tu belleza y mis deseos,y en vez de los laureles didimeos,suspende al árbol de la paz la lira.
En luz que con el sol términos parte, |
10 | o quise hacerte fénix o perderte;pero ¿cómo podrás de mí quejarte,
pues tienes en las manos, que has de verte,la más heroica luz para ilustrartey el ingenio mayor para entenderte?*
El Prólogo.
ESTÁN las musas tan obligadas al favor que el excelentísimo señor conde de Olivares las hace, premiando los ingenios que las profesan, que, como a restaurador suyo, le deben todas justas alabanzas y dignos ofrecimientos. El mío no pudo extenderse más que a tan breve poema, así por la desconfianza de mi ignorancia, como porque, si fuera dilatado, quedaba más imposible de llegar a sus ojos. Añadí a La Circe, La rosa blanca, dedicada a la ilustrísima señora doña María de Guzmán, su única hija, y la Mañana de San Juan, al excelentísimo señor conde de Monterrey, con algunas Novelas, Epístolas y Rimas a diversos, en gracia de sus dueños y servicio de los que estiman la claridad y pureza de nuestra lengua, cuya gramática en algunos ingenios padece fuerza. En razón de la virtud de Ulises, resistiendo, por la obligación a Penélope, el loco amor de Circe, de quien algunos escritores dicen que fue hijo Telegono, que después le mató sin conocerle, mayor disculpa tiene que la que puede dar la poesía al principe de los poetas latinos, haciendo a Elisa Dido tan deshonesta, habiendo sido mujer tan casta, como reprehende Ausonio; pero responda Horacio por la virtud de Ulises en la segunda epístola:
Ardua quid virtus, et quid sapientia possit,utile propossuit nobis exemplar Ulissem.
A Ulises nos dio Homero por ejemplode lo que puede la virtud difícily el ser los hombres sabios.
No quedo confiado ni temeroso; lo primero, por lo que siempre favoreció mi humildad a mi conocimiento; y lo segundo, porque también le sucede a la pluma como a los que toman muchas veces la espada. Por lo menos recibiré las heridas en el ánimo, y no en el miedo.*
Guzmán el bravo
Vengada la hermosa Filisde los agravios de Fabioa verle viene al aldeaenfermo de desengaños.
|
5 | A ruego de los pastoresbaja de su monte al prado,que como se ve queridada a entender que la forzaron.
Eso mismo que desea, |
10 | quiere que la estén rogando,que sube al gusto los preciosamor conforme a los años.
Huyóse Fabio celoso,pensó Fabio hallar sagrado, |
15 | pero hay estados de amorque está en el remedio el daño.
¡Desdichado del que llegaa tiempo tan desdichadoque le matan los remedios |
20 | con que muchos quedan sanos!
En fin, a Fabio rendidoviene a ver su dueño ingrato,alegre porque es amoren las venganzas villano.
|
25 | No va sin galas a verle,aunque pudiera escusarlo,que la mayor hermosurano deja en casa el cuidado.
Lleva de palmilla verde |
30 | saya y sayuelo bizarro,con pasamanos de platasi en ellos pone las manos.
No lleva cosa en el cuelloque Fabio le hubiese dado, |
35 | porque no entienda que vivenmemorias de sus regalos.
Joyas lleva que él no ha visto,no porque le ha hecho agravio,mas porque sepan ausencias |
40 | que no está seguro el campo.
Con una cinta de cifraslleva el cabello apretado,que quien gusta de dar celosse vale de mil engaños.
|
45 | De rebociño le sirvepara mayor desenfadoel capote de los ojosbordado de negros rayos.
En argentadas chinelas |
50 | listones lleva, admiradosde que quepan tantos bríosen tan pequeños espacios.
Llegó Filis al aldea,entró en su casa de Fabio, |
55 | los pastores la recibencomo al sol los montes altos.
Dando perlas con la risaextiende a todos los brazos,que gana mares de amor |
60 | y da perlas de barato.
Apenas Fabio la miracuando a un tiempo se bañaronel alma en pura alegría,los ojos en tierno llanto.
|
65 | No hablaron los dos tan presto,aunque los ojos hablaron,Filis porque no quería,Fabio porque quiere tanto.
Cuando en esta suspensión |
70 | los dos se encuentran mirandoa un tiempo bajan los ojoscomo que envidian de falso.
Habló Filis y tuvieronalma de coral sus labios, |
75 | que ver humilde al rendidohace piadoso al vengado.
A Fabio culpa le poneque es error hacer, amando,con la lengua valentías, |
80 | si el alma no tiene manos.
Él responde y se disculpa,que viendo cerca los brazos,pide perdón ofendidoquien ama desengañado.*
A Don Luis de Góngora
Claro cisne del Betis, que sonoroy grave, ennobleciste el instrumentomás dulce, que ilustró músico acento,bañando en ámbar puro el arco de oro,
|
5 | a ti lira, a ti el castalio corodebe su honor, su fama y su ornamento,único al siglo y a la envidia exento,vencida, si no muda, en tu decoro.
Los que por tu defensa escriben sumas, |
10 | propias ostentaciones solicitan,dando a tu inmenso mar viles espumas.
Los ícaros defienda, que te imitan,que como acercan a tu sol las plumasde tu divina luz se precipitan.*
Soneto
Amor con tan honesto pensamientoarde en mi pecho, y con tan dulce pena,que haciendo grave honor de la condena,para cantar me sirve de instrumento.
|
5 | No al fuego, al celestial atento,en alabanza de Amarilis suenacon esta voz, que el curso al agua enfrena,mueve la selva y enamora el viento.
La luz primera del primero día, |
10 | luego que el sol nació, toda la encierra,círculo ardiente de su lumbre pura,
y así también, cuando tu sol nacía,todas las hermosuras de la tierraremitieron su luz a tu hermosura.*
Soneto
Canta Amarilis, y su voz levantami alma desde el orbe de la lunaa las inteligencias, que ningunala suya imita con dulzura tanta.
|
5 | De su número luego me trasplantaa la unidad, que por sí misma es una,y cual si fuera de su coro alguna,alaba su grandeza cuando canta.
Apártame del mundo tal distancia, |
10 | que el pensamiento en su Hacedor termina,mano, destreza, voz y consonancia.
Y es argumento que su voz divinaalgo tiene de angélica sustancia,pues a contemplación tan alta inclina.*
SonetoBeatus quí invenít amicum verum (Eccl., cap.35)
Yo dije siempre, y lo diré, y lo digo,que es la amistad el bien mayor humano;mas ¿qué español, qué griego, qué romanonos ha de dar este perfeto amigo?
|
5 | Alabo, reverencio, amo, bendigoaquel a quien el cielo soberanodio un amigo perfeto, y no es en vano;que fue, confieso, liberal conmigo.
Tener un grande amigo y obligalle |
10 | es el último bien, y por querelle,el alma, el bien y el mal comunicalle;
mas yo quiero vivir sin conocelle;que no quiero la gloria de ganallepor no tener el miedo de perdelle. |